ADITIVOS: LOS BENEFICIOS MEDIOAMBIENTALES
Pueden los aditivos contribuir a mejorar la calidad del aire y ayudar a proteger el medio ambiente?
El uso diario y el consiguiente desgaste conducen a la acumulación de depósitos como carbón y goma en el sistema de combustible y el motor con el tiempo. Los aditivos pueden ayudar a abordar estos problemas para restaurar la eficiencia, mejorar el rendimiento y reducir el consumo de combustible. Una vez que los residuos comienzan a acumularse, el rendimiento comienza a sufrir y el consumo de combustible aumenta, debido a que el proceso de combustión se ve afectado.
Y aunque los efectos del aumento de la contaminación pueden ser apenas perceptibles en términos de un solo vehículo, el resultado en las ciudades y lugares donde se acumulan los vehículos es que la contaminación se concentra. Es la concentración de combustible desperdiciado y humo de petróleo que ingresa al aire lo que reduce drásticamente la calidad del aire en las conurbaciones más grandes. La contaminación atmosférica tiene efectos perjudiciales para la salud y aumenta las enfermedades, especialmente en las poblaciones vulnerables. Los niños, los ancianos y las personas que viven en áreas con altos niveles de contaminación del aire son especialmente susceptibles.
El bienestar físico y psicológico se ve afectado de manera diferente por el tipo de contaminación del aire a la que estamos expuestos. Una serie de órganos y funciones corporales pueden ser dañados, las consecuencias incluyen, enfermedades respiratorias, daño cardiovascular, fatiga y dolores de cabeza, irritación de los ojos, nariz y garganta, daño a los órganos reproductivos, daño al hígado, bazo y sangre y al sistema nervioso.
Componentes de motor estrangulados
Cuando el carbono, el barniz y la goma se acumulan en los pistones, los vástagos de las válvulas y un sinnúmero de otros componentes, los componentes dejan de funcionar como deberían. El resultado es un menor rendimiento y un aumento de las emisiones. El atascamiento de los anillos de pistón causado por la formación de coque en las ranuras de los anillos afecta incluso a la presión de compresión. Una forma de remediar, o al menos mitigar, el problema, sin incurrir en el gasto y el esfuerzo de desmontar todo el motor, es usar un lavado de aceite de motor. Una aplicación ya disuelve muchos de los depósitos, por lo que puede drenarlos durante el cambio de aceite.
Figura 1 – Pistón cubierto con depósitos pesados de carbón
Figura 2 – Cara y cabeza de la válvula de admisión cubiertas con depósitos de carbón
Figura 3 – Inyector cubierto de depósitos de carbón
Los componentes del sistema de combustible también se ven afectados, y se acumulan residuos que reducen el rendimiento de los inyectores, lo que a su vez conduce a una economía de combustible deficiente y a un aumento de las emisiones.
Se acumulan barnices y gomas en las líneas de combustible, la bomba de combustible, los inyectores de combustible y se forman depósitos de carbón en las válvulas de admisión. Todos los componentes que suministran la mezcla de combustible y aire ya no funcionan como fueron diseñados y, por lo tanto, las emisiones se ven afectadas como resultado. El precio final de la falta de acción es, por supuesto, la sustitución de componentes, que a menudo provoca costes mucho más elevados.
La forma más barata y sencilla de abordar los problemas de acumulación de depósitos es utilizar un limpiador de sistemas para eliminar la suciedad y los residuos para que el vehículo produzca la menor cantidad de emisiones posible. Pero ni siquiera se trata solo de proteger el medio ambiente o a sus conciudadanos, eliminar la contaminación del motor y el sistema de repostaje también significa que no tendrá que seguir llenando el tanque de combustible con tanta frecuencia, lo que le ahorrará dinero de inmediato. Y con el aumento drástico de los precios del combustible, no hay mejor momento que el presente para refrescar su vehículo.
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